Históricamente el Día 8 de octubre de 1944 el Trabajador Rural es reconocido por la sanción del primer Estatuto del Peón de Campo, mediante Decreto N° 28169. Dicho Estatuto representó un gran avance para la época.
Entre otros aspectos, el estatuto establecía medidas en defensa del salario del peón y la estabilidad del trabajador, el pago en moneda nacional, la ilegalidad de deducciones o retenciones, salarios mínimos, descansos obligatorios, alojamiento en mínimas condiciones de higiene, buena alimentación, provisión de ropa de trabajo, asistencia médico-farmacéutica y vacaciones pagas.
El Día del Trabajador Rural en la República Argentina se celebra en honor a la labor fundamental de los trabajadores del campo, quienes desempeñan un papel crucial en la producción de alimentos y el desarrollo económico del país. Este día conmemora la lucha por los derechos laborales y el reconocimiento de la labor de los trabajadores rurales en Argentina.
En el contexto histórico, los trabajadores rurales enfrentaron desafíos significativos en términos de condiciones laborales injustas, bajos salarios y falta de reconocimiento por su arduo trabajo. Durante el siglo XX, se intensificaron los movimientos laborales y se luchó por la dignificación de la labor en el campo y la garantía de derechos laborales.
Es una ocasión para reconocer y agradecer el esfuerzo incansable de los trabajadores del campo que contribuyen de manera fundamental al abastecimiento de alimentos en Argentina y al sostenimiento de la economía nacional. Son héroes anónimos que, con su labor diaria producen alimentos esenciales para la sociedad.
Este reconocimiento se extiende a la dedicación, pasión y valentía que estos trabajadores muestran al enfrentar los desafíos y las condiciones a menudo difíciles que implica la vida rural. Su sacrificio y entrega son la base sobre la cual se construye la prosperidad y el bienestar de nuestra nación.
Enviamos un cálido saludo y expresamos nuestra gratitud a todos los trabajadores rurales de la República Argentina.